El abogado Sergio Alberto Castillo Gómez, con residencia en Bogotá, demandó al Diputado Renzo Alexander García Parra, con la pretensión de lograr su pérdida de investidura por supuesto conflicto de intereses. Entre los hechos de la demanda se afirma que Renzo García fue nombrado como Secretario Académico en la Universidad del Tolima, cargo del cual fue declarado insubsistente el 19 de enero del año 2017. Que el 27 de Junio de 2017, mediante apoderado judicial presentó Demanda de Nulidad y Restablecimiento del Derecho contra la Universidad del Tolima, cuyas pretensiones fueron la declaratoria de nulidad de la declaratoria de insubsistencia.
El demandante manifiesta que el diputado Renzo García hizo una propuesta denominada “ni uno más ni uno menos” en la que propuso que el ingreso laboral en la Universidad del Tolima se encuentre mediada por concurso público de méritos y el retiro de cualquier funcionario sea mediante una evaluación de desempeño. De igual manera manifiesta que mediante acta 029 del 1 de junio 2020, de la Asamblea Departamental, “se realizó Invitación al Rector de la U del Tolima para que socializara la gestión, atención, calidad en la prestación, cobertura, presupuesto y otros, la cual es adicionada por petición del Diputado RENSO GARCIA, quien solicita se citen a otros actores de la Universidad, tales como estudiantes, profesores, etc acogiéndose la proposición”.
En palabras del demandante “el Honorable Diputado RENSO ALEXANDER GARCIA PARRA, al intervenir en las sesiones de los días 12 de mayo y 26 de noviembre de 2020 y no declararse impedido para participar, incurrió en la violación del régimen de conflicto de intereses, porque en las mismas se trataron temas relacionados con el ajuste financiero y reorganización o retiro de personal y él fue una de las personas retiradas del servicio e incluso presentó una demanda cuestionando la legalidad de dicho procedimiento”.
Frente a este tema Ojo Publico (O.P) habló con el Diputado Renzo García.
O.P: Diputado, el abogado Sergio Alberto Castillo Gómez, con residencia en Bogotá, interpuso una demanda en contra suya con la pretensión de lograr su pérdida de investidura por supuesto conflicto de intereses. ¿Qué piensa del tema?
Renzo García: Eduardo Galeano decía «la justicia es como las serpientes, sólo muerde a los descalzos». Con ello quiero referenciar que en este país en lugar de investigar a quiénes se han robado la democracia en la Universidad del Tolima, seguirle la pista a las presuntas irregularidades que denuncian los profesores sobre el manejo de los recursos públicos, contratación, entre otros asuntos, lo que vemos es como se arma una cacería de brujas contra quienes estamos del lado de los intereses de la ciudadanía y tratamos de defender el erario y las instituciones públicas. Me abrieron un proceso de pérdida de investidura por pedir concurso público de méritos para quienes desean trabajar en la Universidad y que no despidan a nadie sin evaluación de desempeño, es decir, me quieren sacar por no estar de acuerdo con los malos manejos de la Universidad, algo ilógico pero real.
O.P: Diputado, en su criterio esta demanda tiene viabilidad?
Renzo García: No me crean a mí, pregunten a cualquier estudiante de derecho que es lo que caracteriza un conflicto de intereses y se darán cuenta que hasta un primiparo confirmará que en mí caso este tema no es procedente. La Asamblea Departamental no tiene competencias en relación a las universidades públicas. Es más, el Artículo 69 de la Constitución Política de Colombia manifiesta que las universidades gozan de autonomía, que se rigen por sus propios estatutos y en este caso no son objeto de control político de la asamblea departamental. Con esto quiero señalar que legalmente esa demanda no es procedente, pero si me genera desgaste, pérdida de tiempo y recursos económicos. He consultado más de una docena de abogados expertos en estos temas y todos afirman que allí no hay nada. Sin embargo, no me puedo confiar y ya estamos preparando la respuesta jurídica.
O.P: El abogado demandante manifiesta que usted debió declararse impedido para participar de estos debates con la Universidad en la medida en que se trataron temas relacionados con ajustes financieros y reorganización o retiro de personal y que usted fue una de las personas retiradas del servicio e incluso presentó una demanda cuestionando la legalidad de dicho procedimiento.
Renzo García: En la Asamblea no hemos aprobado una sola ordenanza en donde Renzo García se pueda beneficiar personalmente. Una cosa es debatir, otra aprobar o generar actos administrativos que conlleven cuestionamientos éticos o dolo. En lo personal me parece inverosímil que interpongan una demanda por exigir que en la Universidad del Tolima no se sigan vinculando personas sin concurso público de méritos y que no sigan robando la democracia interna en la elección de decanos y demás autoridades académicas. Esta demanda tiene algo muy raro de fondo.
O.P: ¿Quién cree que esta detrás de esta demanda?
Renzo García: Supongo que el barretismo. En la UT hay rector barretista y normalmente nadie se desgasta poniendo una demanda como estas sin obtener algún beneficio personal. Yo le interpuse una demanda a la UT en el año 2017, en ese momento estaba defendiendo mis derechos laborales. Ahora, yo soy diputado desde el 1 de enero del 2020, es decir, estamos hablando de acciones que ocurrieron tres años antes, con actos administrativos que ya cobraron ejecutoria. Esa demanda habla de actos desactualizados y desconoce que la universidad del Tolima goza de autonomía universitaria y que el rector no es objeto de control político por parte de la asamblea.
O.P: ¿Usted cree que esto es una persecución política por ser un diputado de oposición y por hacerle criticas al rector de la Universidad del Tolima?
Renzo García: Hace algunos meses superamos una investigación del Consejo Nacional Electoral que también nos generó un desgaste terrible. De ese proceso salimos avante y no vimos ninguno de los medios de comunicación proclives al barretismo haciendo noticia de ese tema, seguramente cuando nos va bien no les importa el tema. Ahora nos demandan por supuesto conflicto de intereses y en el caso no hay ninguna decisión administrativa que lo soporte y ya hay medios que juzgan como si fueran expertos en el tema. En la asamblea no hay una sola decisión que me pueda beneficiar personalmente, eso es algo concreto y demostrable. Sin lugar a dudas creo que detrás de estas acciones existen intereses muy raros.