Luego de dar trámite a varios recursos de reposición interpuestos por miembros de la comunidad, la Procuraduría Ambiental y Agraria, el Concejo de Venadillo, el Concejo Municipal y la Personería de Anzoategui, Asototare, Asochina, la Veeduría de Santa Isabel, la Veeduría de Alvarado y la Organización Pro – Consulta Alvarado en contra de la resolución mediante la cual Cortolima le había otorgado la licencia ambiental al proyecto de generación de energía Hidrototare, esa misma entidad resolvió revocarla de manera definitiva.
“Con esa resolución Cortolima nos dio la razón, en ese proyecto faltaban los estudios geofísicos, geoeléctricos, de sedimentación, el estudio de morfoligía y los estudios de impacto en el tramo que conducía desde la casa de máquinas hasta el túnel, así como faltaban estudios sobre los nacimientos y quebradas que iban a ser impactadas”, explicó Katherine Ariza, integrante del Comité Ambiental de Venadillo.
(Ver también: Hidrototare: la turbiedad de un proyecto hidroeléctrico)
Es importante mencionar que dentro de las consideraciones manifestadas por Cortolima está que: “Debido a que en la información presentada en el Estudio de Impacto Ambiental, como en la respuesta a la información adicional requerida, no se aportó información completa y los soportes que le permitieran a esta Autoridad tener la certeza de la adecuada protección, prevención y/o mitigación de impactos que se pudieran generar en desarrollo del proyecto, la Corporación ordenará el archivo de la solicitud del presente trámite”.
Finalmente, en la resolución expedida por la corporación se resolvió “El archivo del trámite administrativo de solicitud de la Licencia Ambiental presentado por la sociedad HIDROGENE-RADORA IJO S.A.S. para el proyecto de generación, de energía eléctrica denominado «HIDROTOTARE», localizado en jurisdicción de los municipios de Anzoateguí y Venadillo en el departamento del Tolima.
Por su parte, Daniel Pinzón, integrante del Comité Ambiental de Venadillo, manifestó: “Para nosotros es muy gratificante que se haya revocado la licencia ambiental a ese proyecto contra el cual veníamos luchando desde has más de dos años, demostrando la inviabilidad del mismo. Agradecemos a todas las personas que nos apoyaron en este proceso, al Comité Ambiental en Defensa de la Vida, al diputado Renzo García y a todas las personas de Venadillo, Alvarado, Anzoategui y Santa Isabel que nos unimos para defender el territorio y el derecho colectivo a un ambiente sano”.
Es importante aclarar que, en contra ese acto administrativo no procede ningún recurso y en caso que el solicitante continúe interesado en la realización del proyecto, deberá radicar una nueva solicitud de Licencia Ambiental presentando un nuevo Estudio de Impacto Ambiental que dé cumplimiento a los requisitos previstos en el Decreto 1076 de 2015 y, demás normatividad vigente.
Resolución 1042 del 23 de julio de 2020
