En una manifestación reciente frente a las oficinas de Cortolima en Ibagué, ciudadanos expresaron su descontento por la autorización de tala de árboles en el casco urbano. La medida, que busca ampliar los parqueaderos del Centro Comercial la Estación, ha generado preocupación entre los habitantes locales.
Los manifestantes recordaron la gran cantidad de permisos de tala otorgados por parte de la Corporación a grandes constructoras. Estos «arboricidios» afectan la calidad de vida de los Tolimenses y su derecho colectivo a un ambiente sano. Además, se hizo un llamado a investigar la tala de samanes en el Parque Centenario, sin los debidos estudios técnicos.
La ciudadanía cuestiona el actuar de Cortolima, especialmente considerando que esta Corporación dirige la Asociación Nacional de Corporaciones Autónomas de Colombia. La percepción negativa hacia su gestión se ha intensificado, y los ciudadanos exigen mayor transparencia y consideración hacia el ambiente.
Esta protesta resalta la importancia de un manejo sustentable de los bienes comunes naturales y la necesidad de proteger el arbolado urbano. La comunidad espera que sus voces sean escuchadas y que se tomen decisiones más responsables en el futuro.
En el mismo lugar, los manifestantes presentaron derechos de petición solicitando información sobre las acciones de Cortolima y las concesiones que está otorgando entorno a la tala del sistema arbóreo de la ciudad.
