Los pueblos indígenas son claves en la protección de los bosques, la lucha contra el cambio climático, la conservación de la naturaleza y la provisión de recursos como el agua. Los territorios indígenas en la Amazonia colombiana, además de representar el 54% de la región, tienen un rol fundamental para la provisión de servicios ecosistémicos, la conectividad ecológica, la regulación climática y pueden considerarse como barreras contra la deforestación. Su aporte es invaluable, pero no se valora lo suficiente, y en ocasiones, ni siquiera es reconocido.
Después de dos años de trabajo conjunto con la Organización de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana OPIAC, este año finalizamos el documento Territorios Indígenas Amazónicos: contribución al cumplimiento de las metas de Colombia en materia de cambio climático y diversidad, una herramienta que confirma la importancia de los territorios indígenas amazónicos en el país y su aporte a los Objetivos de Desarrollo Sostenible en Colombia, y que será útil para la toma de decisiones y otros procesos de incidencia política.
Este documento presenta además propuestas políticas de la OPIAC para asegurar la conservación de sus territorios en el tiempo y explica cómo las acciones que promueven la conservación de estos territorios son a la vez un aporte a los compromisos que el gobierno de Colombia ha adquirido en materia de cambio climático y biodiversidad frente a la comunidad internacional. Los pueblos indígenas aportan especialmente al ODS 13- Acción por el Clima y al 15- Protección de ecosistemas terrestres, conservando sus territorios con base en los conocimientos de sus ancestros.
Con base en el análisis de los territorios indígenas, el documento vincula los elementos de la agenda política de OPIAC a la importancia de los territorios indígenas, lo cual hace que su incidencia pueda ser mucho más efectiva.
No es posible hablar de conservación de la Amazonía Colombiana sin los pueblos indígenas que la habitan, y sin tener en cuenta su visión ancestral y sus esfuerzos por mantener sus tradiciones. Además de las condiciones de alto riesgo que enfrentan las comunidades debido al avance de modelos extractivistas y actividades ilegales, este año representó un desafío aún mayor por la llegada del Covid 19 a los territorios más remotos.
Fortalecer los procesos de diálogo y apoyo nunca había sido tan urgente. No será posible asegurar la conservación de la biodiversidad si no logramos una visión holística que integre a los pueblos indígenas, que garantice el respeto por sus territorios y que contribuya a la conservación y a la financiación de los esfuerzos que las comunidades emprenden por protegerlos.
WWF Colombia