Destrucción de bosques húmedos de Ibagué amenazan la vida de aves endémicas

Actualidad Ambiente Regional

Cerca de 200 especies de aves habitan estos bosques.

Un panorama muy desalentador se está presentando en el bosque de los cerros noroccidentales de Ibagué en el sector entre Ambalá y Chembe. Varias zonas están siendo taladas para sacar madera, lo que está transformando drásticamente el hábitat del colibrí cabecicastaño (Anthocephala floriceps), el gorrión montes (Atlapetes pallidinucha), la paloma caminera tolimense (Leptotila conoveri), el habia Copetona (Habia cristata), y la recientemente reportada Tangara multicolor (Chlorochrysa nitidissima).

Lo preocupante de esta situación es que estos bosques son los últimos bosques húmedos montanos en buen estado de conservación en los cerros tutelares de Ibagué, y los únicos capaces de sostener poblaciones saludables de especies como tangaras, quetzales, trogones y cerca de 200 especies más; igualmente abastecen de agua a varios acueductos veredales que sirven a miles de habitantes de Ibagué, y aunque existen otros bosques, estos se encuentran altamente fragmentos e intervenidos por el hombre.

Fotos: Hernán Arias

Según Hernán Arias, quien evidenció y reportó lo sucedido, manifestó: “Cortolima estableció una reserva en la zona para precisamente proteger estos últimos fragmentos de bosque húmedo montano en esta zona, y los que son muy probablemente lo últimos fragmentos de este tipo de bosque en buen estado de conservación en el municipio. Lamentablemente muchos bosques en buen estado de conservación como en el que se registró la tangara ayer no se encuentran dentro de la reserva, cerca pero no dentro, lo cual los deja muy susceptibles a que manos criminales hagan lo que les dé la gana con ellos”, aseguró.

Por último, el ambientalista hizo un llamado urgente a las autoridades locales y departamentales a que tomen medidas para frenar la destrucción de estos bosques y así salvar las especies amenazadas que allí habitan, proponiendo integrar los fragmentos de bosque que se encuentran fuera del área de la reserva Bellavista, hacer señalización en la zona, que haya presencia de los órganos de control, realizar jornadas de educación ambiental con las comunidades aledañas a la zona y promover el aviturismo y ecoturismo.

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