Un paciente ibaguereño denunció que a comienzos de abril, tuvo que recurrir a la clínica Avidanti, pues había sentido síntomas que él asoció con COVID-19, pero allí le aseguraron que lo que padecía era dengue, por lo cual le recetaron acetaminofén y una inyección de dipirona para bajar la fiebre, la cual era muy alta.
Posteriormente, el hombre quedó hospitalizado, sin embargo, al tercer día cerca de las 9:00 p.m. le dieron de alta, donde tuvo que abordar un taxi que lo llevó hasta su residencia.
Ante este suceso, su compañera sentimental manifestó “Él no estaba bien y le dieron una incapacidad hasta el 12 de abril”.
A pesar de que el paciente solicitó la prueba de Covid-19, le manifestaron que era dengue, incluso un médico de la EPS fue hasta la casa y descartó que fuera COVID-19, optando la familia por acudir a las redes sociales donde denunciaron lo que estaba pasando, pero la respuesta por parte de las autoridades de la salud fue tardía.
La compañera sentimental del hombre dijo además que al pasar los días el estado salud de su esposo no mejoraba y expresó: “De la Secretaría de Salud nos llamaron y aseguraron que enviarían una ambulancia, pero pasaron tres días y no llegó”, aseguró.
Tras varios días de insistencia, el pasado martes por fin le fue realizada la muestra, donde el paciente en cuestión dio positivo para COVID-19. Hasta la fecha, hay dos integrantes de esta familia que están tras los resultados de las pruebas que se les practicó, los cuales estarán listos en 6 días.
Finalmente, la esposa del hombre hizo un llamado a que se le preste más atención a este tipo de casos, pues asegura que mucha gente estuvo en riesgo de contraer el virus, incluyendo al personal médico que atendió a su esposo.
